divesnews

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha emitido una resolución desfavorable para dos iniciativas turísticas significativas en Quintana Roo: el Condo Hotel Kában Holbox y el Restaurante Nikte-Ha, ubicado en la prestigiosa zona hotelera de Cancún. Estas denegaciones se fundamentan en la insuficiencia de los estudios de impacto ambiental presentados, lo que resalta la rigurosidad de la autoridad en la salvaguarda del patrimonio natural de la región.

En el caso del Condo Hotel Kában Holbox, la Semarnat identificó deficiencias cruciales en la evaluación de impacto ambiental, específicamente la ausencia de datos y muestreos que reflejaran de manera precisa la diversidad de la fauna local. Esta omisión, según la autoridad ambiental, podría llevar a ignorar la presencia de especies migratorias o aquellas con patrones de comportamiento temporales, lo cual es fundamental para una protección integral del ecosistema. Cabe destacar que este proyecto, que contempla la construcción de tres edificaciones de tres pisos con un total de 21 apartamentos, ya se encontraba en fase de comercialización, con unidades ofrecidas a 5.8 millones de pesos cada una, sin haber obtenido aún la aprobación ambiental necesaria.

Por otro lado, el proyecto del Restaurante Nikte-Ha en Cancún, valorado en 8 millones de pesos, también recibió una negativa por parte de la Semarnat. La propuesta incluía la edificación del restaurante en el kilómetro 16.2 del bulevar Kukulcán, a orillas de la laguna Nichupté, e incluso se planeaba la adición de un muelle para embarcaciones menores. Sin embargo, la dependencia federal determinó que la información proporcionada era insuficiente para evaluar los potenciales impactos derivados tanto de la construcción como de la futura operación de este nuevo embarcadero, tal como lo reportó Sipse.

Esta postura de la Semarnat no es un hecho aislado. Como se informó previamente, en el mes de agosto, la misma entidad denegó los permisos para la instalación del Beach Club Balam Kan en Punta Esmeralda, una de las playas más concurridas de Playa del Carmen. En aquella ocasión, la autoridad ambiental concluyó que no se cumplían las condiciones ambientales para edificar un negocio sobre las dunas costeras, un ecosistema de vital importancia. Isidro Santamaría, dirigente de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y socio de la empresa promotora Corporativo Balam Kan, estuvo involucrado en este proyecto. Estas decisiones reiteran la prioridad de la Semarnat en asegurar que el desarrollo turístico en Quintana Roo se realice en estricto apego a las normativas ambientales, garantizando la preservación de los frágiles ecosistemas de la región.

La negación de estos permisos por parte de la Semarnat reafirma su compromiso con la conservación ecológica y la adherencia a la legislación ambiental, asegurando que las iniciativas turísticas en Quintana Roo se desarrollen de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente.