El sector turístico de Cancún y el Caribe mexicano se prepara para una temporada estival excepcionalmente prometedora, evidenciando un notable repunte en la ocupación hotelera y en el tráfico aéreo. Estas cifras, que anteceden el inicio formal del periodo vacacional de verano, auguran una etapa de gran dinamismo económico para la región.
La paradisíaca zona hotelera de Cancún ha registrado recientemente una ocupación del 77.9%, con un promedio mensual que se sitúa en un impresionante 76.4%. Este flujo de visitantes se traduce en más de 64,000 turistas disfrutando de una oferta que supera las 35,000 habitaciones disponibles. Mientras tanto, la encantadora Isla Mujeres lidera las estadísticas con un sólido 81.4% de ocupación, seguida de cerca por Puerto Morelos, que alcanza el 68.8%, y el vibrante centro de Cancún, con el 64.8% de sus alojamientos llenos.
El pulso aéreo de la región también refleja esta efervescencia. El Aeropuerto Internacional de Cancún, un eje crucial para el turismo en el Caribe, reportó un impresionante movimiento de 562 vuelos el pasado sábado 12 de julio, divididos equitativamente entre 281 llegadas y 281 salidas. De estas operaciones, la vasta mayoría, 192 llegadas y 194 salidas, fueron de carácter internacional, conectando este destino con más de 60 ciudades globales. Entre los puntos de origen y destino se encuentran metrópolis como Madrid, París, Londres, Nueva York, Estambul, Toronto, Bogotá, Lima y Buenos Aires, abarcando así los principales nodos turísticos de América y Europa.
La lista de aerolíneas que operan activamente en este período incluye a gigantes de la aviación internacional y nacional, tales como Air France, British Airways, Turkish Airlines, United, Volaris, Viva Aerobús, Aeroméxico, Copa, Avianca, JetBlue, Southwest y Latam Perú, entre otras destacadas compañías. Este amplio abanico de conexiones subraya la posición de Cancún como un destino global de primer orden.
Con estas cifras en mano, Cancún y toda la Riviera Maya se alistan para recibir una masiva afluencia de viajeros durante la próxima temporada veraniega. Este auge no solo promete un vigoroso impulso económico para el área, sino que también plantea importantes desafíos en la gestión de la seguridad, la optimización de la movilidad y la garantía de una calidad de servicio turística inmejorable.
Las proyecciones más recientes de la Asociación de Hoteles de Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos (AHCPMIM) refuerzan este optimismo, anticipando una ocupación hotelera que rozará el 80% en estos tres destinos clave a partir del 16 de julio, fecha que marca el comienzo oficial de la temporada de vacaciones de verano.
Desde la perspectiva de un observador del turismo global, el resurgimiento de Cancún es una señal esperanzadora. Demuestra la resiliencia del sector y la inquebrantable atracción de los destinos caribeños. Es imperativo que las autoridades y el sector privado colaboren estrechamente para no solo gestionar el volumen de turistas de manera eficiente, sino también para innovar en la oferta de experiencias. El desafío no radica solo en atraer visitantes, sino en superar sus expectativas y garantizar que la infraestructura y los servicios estén a la altura de esta creciente demanda. El éxito de Cancún podría sentar un precedente importante para otras regiones turísticas que buscan la reactivación post-pandemia, enfatizando la importancia de la colaboración y la planificación estratégica en el sector.