En un desarrollo significativo para la aviación en la región, un conjunto de nueve compañías aéreas mexicanas ha divulgado sus itinerarios de vuelo programados hasta marzo de 2026. Esta acción se llevó a cabo en respuesta directa a un requerimiento emitido por el Departamento de Transporte (DOT) de Estados Unidos. La solicitud de información por parte de las autoridades estadounidenses se originó a partir de supuestas infracciones por parte de México a un acuerdo bilateral de aviación previamente establecido. La situación ha puesto de manifiesto las tensiones existentes en las relaciones aéreas entre ambos países, especialmente en lo que respecta a las operaciones de carga y la elección de aeropuertos.
La controversia se intensificó a finales de julio, cuando la administración del expresidente estadounidense Donald Trump advirtió sobre la implementación de medidas restrictivas contra las aerolíneas mexicanas. La raíz del conflicto radica en la decisión del gobierno mexicano, bajo la dirección de Andrés Manuel López Obrador, de obligar a las empresas de carga estadounidenses a reubicar sus operaciones del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). Esta imposición, según Washington, ha resultado en pérdidas financieras considerables para las compañías aéreas de carga de Estados Unidos.
Entre las entidades que han cumplido con la entrega de sus planes operativos se encuentran destacadas firmas como Aeroméxico, Aeroméxico Connect, Avianca Cargo México, así como MAS, Viva Aerobus, Volaris, Aerus, Awesome Cargo y Estafeta. Esta lista, según informes de Transporte México, abarca un amplio espectro del sector aéreo mexicano. La divulgación de estos cronogramas busca ofrecer claridad y transparencia en sus operaciones, en un esfuerzo por mitigar las preocupaciones expresadas por el DOT estadounidense.
Las acusaciones de Estados Unidos no se limitan solo a las operaciones de carga. Sean P. Duffy, una figura relevante en el Departamento de Transporte estadounidense, señaló que desde 2022, México ha violado el acuerdo bilateral al revocar franjas horarias (slots) de manera abrupta. Además, expresó un \"evidente desprecio\" por parte de México hacia el compromiso bilateral y acusó al país de un comportamiento sistemáticamente anticompetitivo. Una de las consecuencias más preocupantes mencionadas es la amenaza a la alianza estratégica entre Aeroméxico y Delta, un vínculo crucial para ambas compañías en la conectividad transfronteriza.
El cumplimiento de este requisito por parte de las aerolíneas mexicanas representa un paso hacia la resolución de las disputas aéreas entre México y Estados Unidos. La situación subraya la complejidad de los acuerdos internacionales y el impacto que las decisiones políticas pueden tener en el funcionamiento de la industria de la aviación, afectando no solo a las empresas involucradas sino también a la economía y las relaciones diplomáticas entre naciones.
La presentación de estos itinerarios detalla la capacidad operativa de las aerolíneas mexicanas en el corredor transfronterizo durante los próximos meses. Este suceso, marcado por la intervención directa del gobierno estadounidense, refleja la importancia de la cooperación y el respeto mutuo en los convenios aéreos internacionales para asegurar un flujo constante y equitativo de los servicios de transporte aéreo entre las dos naciones.