Air Europa ha forjado una nueva alianza estratégica que marca un punto de inflexión para la compañía, especialmente tras la reciente imposibilidad de su adquisición por parte de IAG debido a las estrictas condiciones impuestas por la Comisión Europea. Ahora, bajo la dirección de Juan José Hidalgo, la aerolínea ha encontrado en Turkish Airlines un socio clave. Esta colaboración no solo asegura una indispensable inyección de capital para aliviar la carga financiera y afrontar sus compromisos económicos, sino que también permite a Globalia mantener la mayoría del control accionarial de Air Europa. Por su parte, la aerolínea turca capitalizará la extensa red de rutas de Air Europa, con un enfoque particular en el mercado latinoamericano y la Península Ibérica, lo que contribuirá a un crecimiento mutuo.
La estructura de propiedad de Air Europa, que actualmente incluye un 20% en manos de IAG y el 80% restante de Globalia, experimentará cambios significativos con la venta de una participación de entre el 26% y el 27% a Turkish Airlines. Este movimiento estratégico busca principalmente generar los fondos necesarios para liquidar los préstamos estatales recibidos durante la pandemia, especialmente los 475 millones de euros pendientes con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Con una infusión de aproximadamente 300 millones de euros, mayoritariamente a través de una ampliación de capital, Air Europa aliviará su presión financiera, lo que le permitirá enfocarse en el desarrollo de su negocio. Además, esta asociación facilitará la expansión de la aerolínea española hacia el Medio Oriente, aprovechando acuerdos de código compartido y nuevas rutas como la inaugurada a Estambul.
El interés de Turkish Airlines en Air Europa se fundamenta en la complementariedad de las redes de ambas compañías, especialmente en regiones clave como Latinoamérica y la Península Ibérica. Esta adquisición minoritaria, según la aerolínea turca, potenciará su posición estratégica en la aviación global y fomentará el turismo hacia Turquía. Esta decisión se tomó después de que otros competidores de peso, como Air France-KLM y Lufthansa, quienes también mostraron interés en invertir en Air Europa, finalmente declinaran sus ofertas. La historia de la búsqueda de un socio para Air Europa ha sido compleja y prolongada, con negociaciones que se extendieron por casi cinco años con IAG, culminando en la retirada de esta última por la inviabilidad comercial de la operación bajo las condiciones impuestas por las autoridades reguladoras. Sin embargo, la perseverancia y la visión estratégica han permitido a Air Europa asegurar un futuro más prometedor con Turkish Airlines.
La trayectoria de Air Europa demuestra cómo la resiliencia y la capacidad de adaptación son fundamentales en un entorno empresarial dinámico. A pesar de los desafíos y los contratiempos, encontrar un socio estratégico como Turkish Airlines no solo resuelve problemas financieros inmediatos, sino que también abre nuevas vías para el crecimiento y la innovación. Este acuerdo resalta la importancia de la colaboración global y la búsqueda constante de soluciones creativas para superar obstáculos, inspirando a otras empresas a mantener una perspectiva positiva y a perseverar en la construcción de un futuro próspero.