El Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC) ha registrado una notable disminución en su volumen de pasajeros durante el primer semestre del año 2025. Los datos provistos por el Grupo Aeroportuario del Sureste (ASUR) revelan que el total de viajeros transitando por esta terminal aérea fue de 15,482,453, lo que representa una baja del 4.7% en comparación con el mismo período de 2024. Este retroceso se manifestó en ambos segmentos de pasajeros: los internacionales, que vieron una reducción del 6.2%, y los nacionales, con un descenso más moderado del 1.0%. Esta tendencia contrasta con el crecimiento observado en otras terminales bajo la gestión de ASUR, como las de Colombia y San Juan, Puerto Rico, que sí reportaron incrementos en su tráfico.
Ante este panorama, la gerencia del AIC, a través de su director, Carlos Trueba, ha expresado confianza en una eventual recuperación. Se espera que la brecha negativa en el número de pasajeros se reduzca progresivamente, con la meta de equiparar las cifras récord de 2024, año en que el aeropuerto manejó 30 millones de usuarios. La posición de Cancún como la principal puerta de entrada para el turismo foráneo en México hace que esta contracción sea un indicador importante, potencialmente influenciada por factores como la desaceleración global del turismo, ajustes en la conectividad aérea o condiciones económicas generales desfavorables. En este sentido, voces expertas del ámbito turístico sugieren que la clave para revertir esta situación radica en fortalecer las campañas de promoción del destino, diversificar los mercados de origen de los visitantes y optimizar la infraestructura turística. Además, se ha señalado la urgencia de modernizar servicios aeroportuarios, como migración y aduanas, los cuales, según el presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Turismo Receptivo (Amatur), Sergio González Rubiera, se encuentran rezagados respecto a los estándares internacionales.
La situación actual del Aeropuerto de Cancún nos invita a reflexionar sobre la resiliencia y la capacidad de adaptación de la industria turística. A pesar de los desafíos, la visión optimista de los líderes del sector y el enfoque en la mejora continua subrayan la importancia de la proactividad y la innovación. Para superar los obstáculos y prosperar, es fundamental que todas las partes involucradas –autoridades, empresarios y la comunidad– colaboren en la implementación de estrategias que no solo atraigan a más visitantes, sino que también enriquezcan su experiencia, asegurando así un futuro más brillante y sostenible para destinos tan emblemáticos como Cancún.