La joven escaladora Veronica Chik, de tan solo nueve años y originaria de Hong Kong, ha dejado una huella imborrable en el mundo de la escalada al completar la desafiante ruta 'Fish Eye' en Oliana. Este notable logro la posiciona como la escaladora más precoz en alcanzar la dificultad de 8c, superando el récord establecido previamente por Théo Blass, quien logró una hazaña similar a los diez años. Desde sus inicios en la escalada a los cinco años, Veronica ha demostrado un talento y una dedicación excepcionales, captando la atención de la comunidad de escalada con su impresionante progresión.
Este triunfo no es casualidad, sino el resultado de un plan meticuloso y el apoyo incondicional de sus mentores, Toni Arbonés y David Gambús. Estos entrenadores, quienes previamente habían coincidido con Veronica en China, la animaron a viajar a Cataluña con su padre para perfeccionar sus habilidades en las imponentes paredes rocosas de Oliana. Su orientación técnica y el apoyo logístico fueron cruciales para que Veronica pudiera enfrentar y superar este monumental desafío, puliendo sus técnicas y fortaleciendo su resistencia en una de las vías más emblemáticas del mundo.
'Fish Eye', una ruta creada por el legendario Chris Sharma en 2009, es reconocida por sus cincuenta metros de recorrido que exigen una resistencia suprema. A lo largo de los años, esta vía ha sido un campo de pruebas para escaladoras de élite, con nombres como Daila Ojeda, Eva López y Janja Garnbret dejando su marca, algunas incluso con ascensos a vista. La culminación de esta vía por parte de Veronica no solo añade su nombre a esta prestigiosa lista, sino que también redefine lo que se creía posible para escaladores a su corta edad, destacando la importancia de la perseverancia, la guía experta y el inquebrantable espíritu humano en la consecución de metas extraordinarias. Su logro inspira a mirar más allá de los límites percibidos, demostrando que la juventud, combinada con pasión y dirección adecuada, puede alcanzar cimas inimaginables.