La estrategia de sostenibilidad en el sector hotelero ha evolucionado de un mero valor añadido a un requisito fundamental para la viabilidad económica y social de los negocios. En este contexto, Marugal, a través de su Directora de Sostenibilidad y Regeneración, María Rondón, demuestra cómo un enfoque holístico que integre el cuidado del entorno y el bienestar social, junto con la rentabilidad, es crucial para el éxito a largo plazo. La empresa no solo busca innovar en prácticas medioambientales y regenerativas, sino que también enfatiza el papel vital de la tecnología y la colaboración con la comunidad para generar un impacto positivo y duradero. Este compromiso responde a una creciente demanda del mercado y de los consumidores, quienes cada vez más valoran la ética y la transparencia en sus elecciones de alojamiento.
La visión de Marugal trasciende la mera eficiencia operativa, proyectándose hacia la creación de experiencias de lujo que sean inherentemente sostenibles. Sus iniciativas abarcan desde el desarrollo de proyectos de reforestación y economía circular hasta la integración de tecnologías avanzadas para monitorear consumos y medir la huella ecológica. La sostenibilidad social emerge como un pilar igualmente importante, con una fuerte apuesta por el empleo local y el apoyo a proyectos comunitarios que benefician a colectivos vulnerables. Esta estrategia proactiva, en un mercado cada vez más consciente, posiciona a Marugal como un referente en la hotelería de lujo responsable, anticipándose a las tendencias futuras de una industria que se encamina hacia la obligatoriedad y la transparencia en sus prácticas sostenibles.
El sector hotelero se enfrenta a un punto de inflexión donde la sostenibilidad ya no es opcional. Como señala María Rondón, directora de Sostenibilidad y Regeneración de Marugal, la supervivencia en el mercado actual depende de la adopción de decisiones que mejoren la experiencia del cliente y el valor del activo, manteniendo un equilibrio delicado entre los pilares ambiental, social y económico. Este enfoque holístico es fundamental no solo para prosperar, sino para asegurar la longevidad de las operaciones, priorizando la calidad de vida y los recursos de los destinos. La hotelería debe comprender que el bienestar del entorno y de las personas son condiciones previas para el éxito financiero.
La sostenibilidad en la hotelería de hoy implica mucho más que simples certificaciones; es una filosofía que impregna cada aspecto de la gestión. La búsqueda de un equilibrio entre la prosperidad económica, la protección del medio ambiente y el bienestar social es esencial para garantizar un futuro viable. Hoteles que no se adapten a esta nueva realidad correrán el riesgo de quedar rezagados, ya que los consumidores y los inversores están demandando cada vez más transparencia y un compromiso genuino con prácticas responsables. La visión de Marugal resalta la importancia de la calidad de vida y la conservación de los recursos locales como elementos intrínsecos al valor de la experiencia turística, subrayando que la rentabilidad no puede divorciarse de la responsabilidad ambiental y social. Solo mediante la integración de estos principios se puede aspirar a un crecimiento sostenible y a la resiliencia ante los desafíos futuros.
Marugal ha implementado diversas iniciativas innovadoras que demuestran su compromiso con la sostenibilidad, adaptando sus objetivos a la realidad específica de cada establecimiento y su entorno. Ejemplos incluyen el desarrollo de un huerto para autoconsumo de dos hectáreas y la creación del primer bosque para absorción de carbono en un hotel balear en Cap Rocat. En La Zambra, la colaboración con la Cruz Roja para la reforestación y la oferta de eventos de “impacto positivo” evidencian una estrategia proactiva. La tecnología juega un papel crucial, permitiendo a Marugal monitorear en tiempo real los consumos energéticos, hídricos y la gestión de residuos, además de comunicar a los clientes el impacto positivo de su estancia y ofrecer opciones para compensar su huella ambiental.
El enfoque de Marugal en la sostenibilidad social es igualmente profundo, reconociendo que el sector de servicios depende intrínsecamente de las personas. La empresa supera el 65% en compras a proveedores locales y colabora con empresas sociales que emplean a personas vulnerables, demostrando cómo la industria hotelera puede ser un motor de desarrollo económico inclusivo. Un ejemplo notable es la contribución del hotel Urso, que dona aceite de cocina usado para proyectos de economía circular y apoya fundaciones sociales. Además, involucra a sus clientes en estas iniciativas a través de la selección de productos locales, el uso de energías renovables y el apoyo a proyectos de regeneración marina. Este compromiso integral posiciona a Marugal a la vanguardia de una industria que se mueve hacia una sostenibilidad obligatoria, circular y transparente, impulsada por la regulación y las demandas crecientes de consumidores e inversores, quienes buscan experiencias éticas y respetuosas con el entorno.