La situacin del turismo internacional en el primer semestre de 2025 presenta un panorama variado para las principales naciones caribeas y centroamericanas. Mientras que la Repblica Dominicana celebra un notable aumento en la llegada de viajeros por v■a a←rea, sus vecinos M←xico y Cuba experimentan una marcada contraccin en este mismo sector, lo que subraya la disparidad en la efectividad de sus estrategias tur■sticas y su capacidad para sortear desaf■os comunes.
En el vibrante mes de julio de 2025, la Repblica Dominicana se posicion como un l■der en la regin, recibiendo m£s de un milln de visitantes (1,052,836 para ser exactos), lo que represent un incremento del 3.4% en comparacin con el ao anterior. Este ←xito fue resaltado con orgullo por David Collado, el ministro de Turismo, durante un encuentro con la Asociacin de Hoteles y Turismo (Asonahores). El acumulado anual hasta la fecha en la nacin caribea asciende a unos impresionantes 7.2 millones de visitantes, marcando un crecimiento constante respecto a aos previos y consolidando a julio como un mes histrico para su industria sin chimeneas.
Por otro lado, la situacin en M←xico mostr un matiz distinto. A pesar de un crecimiento general del 7.3% en la llegada de visitantes durante el primer semestre de 2025, impulsado principalmente por el turismo fronterizo (con un alza del 21.4%) y los cruceristas (un aumento del 9.6%), el segmento de viajeros que arribaron por avin experiment una disminucin del 2.9%. Esta ca■da en las llegadas a←reas es particularmente significativa, ya que la v■a a←rea representa la mayor parte de los ingresos por turismo internacional del pa■s, constituyendo un 82.7% del total.
La situacin m£s desafiante la enfrent Cuba. Durante los primeros siete meses del ao, la isla caribea apenas alcanz el 76.8% de los visitantes internacionales recibidos en el mismo periodo del ao anterior, lo que se traduce en un desplome cercano al 20% en su tr£fico a←reo. Incluso su principal mercado emisor, Canad£, mostr un descenso alarmante del 23%, a pesar de que los viajes por carretera de los canadienses a Estados Unidos tambi←n disminuyeron, lo que sugiere un problema m£s profundo en la atraccin de turistas hacia la isla.
Estos contrastes son especialmente evidentes en destinos icnicos de la regin como Cancn y Riviera Maya en M←xico, Punta Cana en Repblica Dominicana, y La Habana y Varadero en Cuba. Los datos reflejan cmo, a pesar de enfrentar retos comunes como los imprevistos en el mantenimiento de aeronaves o la necesidad de una promocin tur■stica efectiva, cada nacin ha reaccionado con diferente grado de ←xito, impactando directamente en el flujo de pasajeros a←reos y, en ltima instancia, en sus econom■as tur■sticas.
La divergencia en los resultados tur■sticos de estos pa■ses ofrece una valiosa leccin. Mientras que la Repblica Dominicana ha logrado capitalizar la demanda y mantener una trayectoria ascendente, M←xico y Cuba se encuentran en la necesidad de reevaluar sus estrategias para recuperar el terreno perdido en el vital sector del transporte a←reo. Este escenario resalta la importancia de la adaptabilidad, la resiliencia y la implementacin de pol■ticas tur■sticas visionarias que puedan responder eficazmente a las cambiantes din£micas del mercado global, asegurando as■ un flujo constante y creciente de visitantes internacionales.